martes, 28 de junio de 2022

Técnicas y Estrategias para Contestar preguntas en exámenes tipo Test

En los exámenes tipos test, en los que las respuestas erróneas penalizan,  muchas veces nos planteamos si es conveniente o no contestar. Hay otros aspectos más importantes que ese, que podremos ver en este artículo. También tratamos la cuestión de la conveniencia o no de responder las preguntas en las que tengamos dudas con las respuestas.

0) Estudiar, Estudiar y Estudiar, hasta dominar todos los aspectos teóricos y prácticos de la asignatura. 

1) Leer las instrucciones, nos interesa la siguiente información: 
- Si las preguntas pueden tener más de una respuesta correcta, y en este caso hay que marcar todas las respuestas correctas. 
- Cuántos puntos vale cada pregunta, cuál es la máxima puntuación posible, y qué puntuación es necesaria para aprobar. 
- Cuántos puntos te quitan por cada respuesta incorrecta, o si al contrario no hay penalización - Si las preguntas no respondidas cuentan como incorrectas. 
- Cuánto tiempo tienes para el examen. Organiza 10 minutos para repasar al final y con el resto del tiempo calcula el tiempo a utilizar en cada pregunta o cada bloque.

2) Responde primero las preguntas fáciles. 
 Después las preguntas difíciles pero que se puedan resolver. 
Deja las preguntas con respuestas dudosas para el final. 
Algunas de las preguntas del examen puede que nos aclaren respuestas anteriores en las que teníamos dudas. 

3) Dudas respecto a responder o no hacerlo a algunas de las preguntas: 
Caso 1: Sin penalización en respuestas incorrectas. 
Caso 2: Penalización en las respuestas incorrectas y en las no contestadas. 
Caso 1 y caso 2 son similares. Conviene seguir el orden dado anteriormente de dejar las preguntas con dudas para el final. Una vez bien pensadas, hay que responder al 100% de las preguntas. Hay que CONTESTAR ya que no se corre ningún riesgo adicional. 
Caso 3: Con penalización en las respuestas incorrectas, y sin penalización en las no contestadas: Normalmente cada pregunta tiene 4 respuestas, una es correcta por la que nos darán 1 punto y 3 son erróneas por las que nos quitarían 0,33 puntos. Sin tener conocimientos (al azar) de cada 4 preguntas acertaríamos 1 y fallaríamos 3. En el examen sacaríamos un 0 (=1-0,33-0,33-0,33). 
A: valor de las respuestas acertadas (normalmente A=1) 
P: valor de las respuestas erroneas (penalización) 
n: Nº de opciones válidas para cada pregunta Puntos que se obtendrían en cada pregunta: (A-(n-1)P)/n Si lo que pretendemos es obtener puntos > 0 al hacer el examen 

Fórmula decisoria
                       1 
R= ------------------------------ > P 
  (Nº de Opciones válidas - 1) 
si R es > Penalización por respuesta erronea --> mejor contestar. Hay un riesgo de que salga mal, pero la estadística nos dice que sumaremos puntos (en promedio). 
Si R es <= Penalización por respuesta erronea -> mejor NO CONTESTAR Ejemplo: si el no de respuestas es 4, R=1/(4-1)=0,33. Debemos arriesgarnos a contestar siempre que nos quiten menos de 0,33. Si de las 4 opciones disponibles 2 las descartamos por imposibles nos quedaría R=1/(2-1)=1, deberíamos contestarla siempre que no nos quiten 1 punto por cada error cometido. 

4) Repasa las preguntas y respuestas. Muchos errores se cometen por no haber leido bien las preguntas. 

5) Técnicas para evitar errores tontos: 
- Lee detenidamente cada pregunta antes de responderla: Se pierden muchos puntos por leer mal la pregunta, y es un error fácilmente evitable. Una simple coma o un adverbio pueden cambiar todo el sentido a una frase. Muchas veces el exceso de confianza o la rapidez con la que leemos algo hace que supongamos cosas que no están escritas. Si queremos evitar este error, hay que leer y releer la pregunta antes de decidir qué respuesta seleccionar. 
- Intenta responder sin mirar las opciones: Si miras las opciones sin hacer el esfuerzo que supone pensar o calcular la respuesta correcta, es más fácil que te equivoques al ver una opción que a primera vista parece razonable, pero que no es la correcta. 
- Lee todas las opciones: Si te paras en cuanto ves una opción que te parece correcta, es posible que no llegues a ver otra opción que es parecida pero diferente, y mejor que la primera. 

6) Técnicas para responder a preguntas difíciles 
- Cuestiona opciones que no encajan gramáticamente con la pregunta. Para respuestas no numéricas, asegura que la respuesta que te parece correcta concuerda en número y genero con la pregunta. O, si no sabes cuál es la respuesta correcta, a veces puedes descartar algunas opciones utilizando esta técnica. 
- Cuestiona opciones que no te suenan para nada. 
- Cuestiona opciones que contienen palabras negativas o absolutas. Muchas veces la respuesta es otra opción parecida y no absoluta. Por ejemplo, si dos opciones son “siempre” y “frecuentemente”, no elijas uno de los dos sin pensar bien la razón por la que la otra está equivocada. 
- Compara dos respuestas que parecen correctas. Si dos opciones parecen correctas, compáralas para encontrar las diferencias, y vuelve a leer la pregunta para determinar cuál es la mejor respuesta. - Considera “Todas las anteriores”. Si dos de tres respuestas te parecen correctas tras releer la pregunta y existe la opción “Todas las anteriores”, hay una buena probabilidad de que sea la respuesta correcta 
- Despeja la incógnita. Para ecuaciones matemáticas donde se trata de despejar una incógnita, puedes reemplazar la incógnita con el valor de cada opción, y ver directamente si resuelve la ecuación o no. Por ejemplo, si se trata de despejar x en la ecuación, 9x2 - 8x + 9 = 15, te puede resultar más fácil o más rápido probar cada opción en vez de despejar la ecuación. 
- Asegura que la respuesta que eliges es siempre correcta. Recuerda que la mejor respuesta debe ser cierta siempre, en todos los casos, y sin excepción. Si crees que una respuesta es la “más” correcta, pero hay una excepción, probablemente la respuesta correcta es otra. 
- Cuestiona los extremos: En preguntas con respuestas numéricas, considera el valor más alto y el valor más bajo por último, tras considerar los valores intermedios. Confía en tu primer instinto: Si hay dos respuestas que te parecen que podrían ser correctas y te decantas por una de ellas, no vuelvas más tarde a cambiar tu respuesta por la otra. Estudios demuestran que tu primera impresión es correcta con más frecuencia. 
- Favorece las opciones más largas: La persona que escribe el test quiere que la respuesta sea totalmente correcta, y puede que haya añadido más detalle para lograrlo, haciendo que sea más larga que las demás opciones. 
- Evita respuestas con errores tipográficos: Al elaborar el examen el profesor normalmente dedica más tiempo a crear la respuesta correcta, y la vuelve a leer más veces antes de publicar el test que las repuestas incorrectas. Así que si hay un error ortográfico, es más probable que esa respuesta sea incorrecta. 

NO OLVIDAR: 
- Descansar bien la noche anterior. La memoria y capacidad de razonamiento serán mayores. 
- Llegar a tiempo y con todo el material que necesitas. Revísalo la noche anterior. 
- Elegir un lugar tranquilo para realizar el examen. Evita los pasillos o puertas y también aquellos compañeros que te pueden distraer o que pretendan copiar. Corres el riesgo de perder el tiempo y, aunque no copies, de que te expulsen a ti también. 

Bibliografía 
https://yaq.es/reportajes/test 
https://formasformacion.com/como-usar-a-favor-la-estadistica-en-los-examenes-tipo-test/